Un giro refrescante para el bienestar: jugo casero de ortiga y limón

En el jardín de los remedios naturales y las bebidas que mejoran la salud, hay una joya escondida que ha sido venerada durante siglos pero que a menudo se pasa por alto: la ortiga. Esta humilde planta, cuando se combina con la vibrante ralladura de limón, crea un potente jugo que no sólo es refrescante sino que está repleto de beneficios para la salud. ¿Y la mejor parte? Puedes hacerlo sin conservantes ni necesidad de cocinar. Profundicemos en cómo puedes preparar este delicioso brebaje, perfecto para nutrir tu cuerpo y espíritu.

La magia de la ortiga

La ortiga, a menudo considerada simplemente una mala hierba molesta, es en realidad una planta rica en nutrientes. Está cargado de vitaminas A, C y K, así como de minerales como hierro, magnesio y calcio. La ortiga se ha utilizado en la medicina herbaria para favorecer la salud de las articulaciones, aliviar las alergias y estimular el sistema inmunológico.

El sabroso lifting de limón

El limón, una maravilla de los cítricos, no es sólo un potenciador del sabor. Es rico en vitamina C, favorece la digestión y puede ayudar a desintoxicar el cuerpo. Su sabor brillante y picante complementa los tonos terrosos de la ortiga, lo que lo convierte en un jugo estimulante y calmante.

Elaborar jugo de ortiga y limón

Ingredientes:

Un puñado generoso de hojas frescas de ortiga (asegúrese de usar guantes al manipularlas)

1 limón grande

Agua (cantidad deseada)

Opcional: miel u otro edulcorante natural al gusto.

Instrucciones:

1.Prepare la ortiga: Enjuague bien las hojas de ortiga con agua fría. Aunque tradicionalmente las ortigas se hierven para quitarles el aguijón, para obtener este jugo crudo, simplemente las remojas en agua fría durante unas horas o toda la noche. Esto ayuda a disminuir su picadura y los hace seguros para el consumo crudo.

2.Exprime el limón: Mientras las ortigas están en remojo, exprime el limón y reserva. El limón no sólo aporta sabor sino también vitamina C, que puede mejorar la absorción de hierro de las ortigas.

3.Licuar: Escurrir las ortigas y agregarlas a una licuadora con el jugo de limón y el agua. Licue hasta que quede suave. Para quienes prefieren un sabor más dulce, añade un poco de miel o tu edulcorante natural preferido.

4.Colar y servir: Cuela la mezcla para eliminar las fibras o sólidos restantes, luego vierte el jugo verde vibrante en un vaso.

Disfrute de este jugo de ortiga y limón como tónico matutino o como refrescante estimulante por la tarde. Es una bebida sencilla pero profundamente beneficiosa que favorece la salud y la vitalidad en general. ¡Salud por tu viaje de bienestar con este elixir natural, sin conservantes y crudo!